
Las autoridades federales identificaron a dos de los 8 militares que perdieron la vida tras la explosión de una mina terrestre durante un patrullaje en la zona serrana ubicada entre los estados de Michoacán y Jalisco.
El incidente ocurrió en una región conocida como “El Santuario”, durante un operativo de reconocimiento efectuado por elementos de Fuerzas Especiales de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Hace unos momentos reportaron que la cifra de militares de las Fuerzas Especiales fallecidos por la explosión de un artefacto tipo mina, se elevó a ocho.
Los militares, que se desplazaban a bordo de un vehículo blindado, activaron de manera accidental un artefacto explosivo tipo mina terrestre, lo que provocó una detonación que destruyó por completo la unidad y causó la muerte de hasta el momento 8 uniformados. Otros dos resultaron heridos y fueron trasladados vía aérea a un hospital militar en Apatzingán, donde reciben atención médica especializada.
Hasta el momento, han confirmado la identidad de dos de los elementos fallecidos: el subinspector de la Guardia Nacional Jovany R. y el subagente Jorge Alberto C.
Zona de conflicto entre grupos criminales
La franja limítrofe entre Michoacán y Jalisco ha sido escenario frecuente de violencia vinculada al crimen organizado. En las últimas semanas, se han intensificado los operativos conjuntos entre el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional en esta región, donde operan células del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y otros grupos que disputan el control territorial.
Los enfrentamientos armados, ataques con explosivos y emboscadas han sido constantes en esta área, considerada estratégica para actividades ilegales como el tráfico de drogas y armas. Las autoridades mantienen un despliegue de seguridad reforzado para intentar contener la violencia y desarticular las estructuras criminales que operan en la zona.






