Dicen que el que pisa tierra santandereana es santandereano, y aunque sus orígenes están a miles de kilómetros de distancia, el colomboespañol David Alonso,
reciente campeón mundial de Moto3, reconoce a Bucaramanga como una parte de su vida al ser la tierra que vio nacer a su progenitora, Sandra Marcela Gómez.
La misma que con orgullo celebra los triunfos de su hijo, un joven de 19 años que este año ha paseado la bandera de Colombia por el mundo entero, de la mano de su moto, con la que logró coronarse en lo más alto de la categoría menos cilindrada del Campeonato Mundial de Motociclismo, que es considerado el certamen internacional más importante en el ámbito de la velocidad.
A su corta edad, Alonso se convirtió en el tercer campeón sudamericano, antes lo habían logrado los venezolanos Johhny Cecotto (1975) y Carlos Lavado (1983 y 1986).
Días después de su gran hazaña, el corredor habló con esta casa periodística y con distintos medios del país, relató detalles de su triunfo y su conocimiento sobre la ‘Ciudad Bonita’.
Dicen que el que pisa tierra santandereana es santandereano, y aunque sus orígenes están a miles de kilómetros de distancia, el colomboespañol David Alonso, reciente campeón mundial de Moto3, reconoce a Bucaramanga como una parte de su vida al ser la tierra que vio nacer a su progenitora, Sandra Marcela Gómez.
La misma que con orgullo celebra los triunfos de su hijo, un joven de 19 años que este año ha paseado la bandera de Colombia por el mundo entero, de la mano de su moto, con la que logró coronarse en lo más alto de la categoría menos cilindrada del Campeonato Mundial de Motociclismo, que es considerado el certamen internacional más importante en el ámbito de la velocidad.


A su corta edad, Alonso se convirtió en el tercer campeón sudamericano, antes lo habían logrado los venezolanos Johhny Cecotto (1975) y Carlos Lavado (1983 y 1986).
* ¿Cómo ha asimilado el título de Campeón Mundial?
“Ya en casa después de todo lo que ha pasado, digiriendo un poco lo que he vivido en las últimas horas. Darle un campeonato Mundial a Colombia es algo que siempre había querido, desde los 5 años que empecé en el mundo de las motos, siempre me levantaba pensando y conseguirlo, me cuesta creerlo pero me siento muy feliz”.
* ¿Cómo vivió las horas previas a su triunfo en Moto3?
“Antes de irme a dormir escribí una carta de cómo me sentía en el momento, esto viene por mi abuelo de Colombia, un interés por la escritura, escribir en un papel lo que sentía en el momento para que el día de mañana pueda leerlo y recordar”.
* ¿Qué fue lo más tenso y lo que más le costó en la carrera que definió el campeonato?
“Estuve tenso en las primeras vueltas, no fue fácil porque no quería caerme y tenía ese miedo a perder o a no ganar, luego a falta de 10 vueltas dije toca hacer un cambio mental, porque si no, no voy a conseguirlo, me quité los miedos y fui sin miedo al éxito, dije si me tengo que caer, me caigo”.
* ¿Recuerda alguna anécdota que vivió en ese momento?
“Cuando salí de la última curva solo me imaginaba el letrero del equipo que decía campeón del mundo 2024, salgo y no veo nada. Hay un video muy gracioso que no les da tiempo para prepararlo, paso la línea de meta y pensé que me habían sancionado; traté de preguntar si era campeón y me decían que sí. Luego, ya en la celebración con la minimoto con la que empecé en este mundo, la que llevé de los cinco a los once años, fue muy especial.
Lo que más feliz me hizo aparte de ganar el Mundial fue entrar al ‘pit lane’ y ver como toda la gente me estaba esperando para felicitarme y chocar mi mano”.

* ¿Qué nuevos objetivos tiene en mente David Alonso?
“Después del campeonato del mundo me ha quedado una sensación de vacío. Llevaba este año por y para este objetivo, y esa meta ya la he logrado, entonces estoy como sin saber qué hacer pero luego pensando bien, lo primero que tengo son cuatro carreras por delante, a disfrutar, ofrecer lo mejor que pueda y llegamos a la categoría Moto2, muy ilusionado de comenzar una nueva aventura”.
* ¿Cuáles puntos deberá mejorar para enfrentar la próxima temporada?
Es importante cerrar los capítulos, tengo que prepararme muy bien para la próxima temporada. Físicamente tengo que ganar unos kilos a nivel de músculo para llevar la moto porque pesa mucho más, la potencia y el peso es mayor. A nivel de pilotaje también tengo que cambiar el estilo para adaptarme, porque se conduce de una forma diferente”.
* ¿Cuál es el significado de ondear la bandera colombiana después de cada triunfo a lo largo de la temporada?
“Al final es un honor subir la bandera de mi madre, por eso lo hice, por ella, representar su país, donde nació. Cada vez que subo al podio y ahora cuando suena el himno, yo lo aprendí, cada vez lo siento más, es un orgullo poder subirlo siempre que se pueda a lo más alto”.
* ¿Conoce Bucaramanga, qué recuerda de la ciudad?
“Mi mamá es de Bucaramanga, se dice que los bumangueses son bravos, en Colombia he estado en Medellín, Bogotá, Cartagena. En Bucaramanga estuve de muy pequeño, apenas tengo recuerdos y ojalá pueda ir ahora, más adulto, al sitio donde nació mi madre”.
* ¿Qué suele hablar con su mamá sobre el momento qué está viviendo?
“Al final es un sueño conjunto, mi madre y padre están muy orgullosos porque se han sacrificado por mí, su vida giraba en torno a nuestro objetivo, entonces después de tanto sacrificio ellos también están muy emocionados. Mi madre está muy feliz con llevar su país a lo más alto, este es el trabajo de muchos años y cuando se consigue uno queda como en paz”.
* ¿Cómo nace el baile que usted suele hacer después de cada triunfo?
“El baile surge de la sangre colombiana, una de las cosas que aprendí este año es que aunque estés en una racha buena, la victoria no es rutina, es decir, no puedes dejar que se convierta en eso. Ganar no es fácil y hay que darle el valor que se merece, son más veces en las que se pierde que las que se gana y esa es mi celebración para pasármela bien”.
* Sus abuelos están de visita, ¿algún capricho qué les haya pedido desde Colombia?
“Viajaron los abuelos para celebrar, estoy contento porque van a venir a España, tengo muchas ganas de darles un abrazo. Volveremos a comer arepas colombianas y siempre que vienen tenemos gastronomía colombiana en casa. El ajiaco me apasiona, a final de año estaré en Colombia, espero pasarla bien rico”.